sábado, 15 de mayo de 2010

Otra de espárragos

A riesgo de cansar, pero antes también de que me caduquen (otra vez más) la receta y las fotos en el disco duro, aquí va otra de espárragos, esta vez con receta eso sí, y sin mucho misterio.

Y es que el espárrago sigue de temporada y omnipresente por estas tierras. La forma más clásica de servirlos en Alemania es con salsa holandesa, pero como a mí no me gusta nada propongo una alternativa sacada de esta revista de cocina.

Spargel mit Schnitzel

Espárragos con salsa de huevo
1 kg de espárragos blancos frescos
2 huevos cocidos
2 cucharadas de vinagre de vino blanco
1 cucharada de mostaza
7-8 cucharadas de aceite de oliva
medio ramillete de cebollino fresco
sal y pimienta

Elaboración
Pelamos los espárragos empezando dos dedos por debajo de la yema con un pelador (unos tres cuartos del espárrago). Cortamos luego la base del espárrago, la parte más leñosa. Los hervimos en agua con sal, en una cazuela grande en la que quepan enteros, de 10 a 15 minutos.
Para la salsa necesitamos dos huevos cocidos. Los pelamos y separamos la clara de la yema. Rallamos las yemas y picamos las claras. Picamos también el cebollino. Aparte mezclamos el vinagre con el aceite y la mostaza y salpimentamos a gusto. Añadimos los ingredientes picados a esta mezcla.

Servimos los espárragos con la salsa y, de forma también tradicional en Alemania, acompañando a un Schnitzel (o filete empanao, vamos) con limón y sus patatucas cocidas.