domingo, 28 de diciembre de 2008

Premios del Juego del Adviento

Antes de dar a conocer al ganador o ganadora (nos os saltéis estas líneas que os veo venir) quiero agradeceros el interés y la gran acogida que le habéis dado al juego, así como la cantidad de mensajes y comentarios que me habéis enviado durante estas semanas. Yo me lo he pasado pipa jugando y hablando un poco de las costumbres navideñas que, al menos para mí, fueron nuevas cuando llegué a Alemania. Así que vamos a hacer un repaso por las cuatro preguntas que había que contestar.

Adventskranz

El PRIMER domingo de Adviento teníamos que buscar el día en el que San Nicolás se pasa por las casas en Alemania y deja en los zapatos de niños y adultos dulces, galletas y mandarinas. Nikolaus, como es conocido en alemán, se pasa la noche del 5 al 6 de diciembre, el Día de San Nicolás es según el santoral católico el 6 de diciembre. Además del día seis, hay otro día para el intercambio de regalos en Alemania, es la tarde de Nochebuena, el 24, y no el 25 como es tradición en otros países, también lo mencioné aquí. Sin embargo. en esta ocasión no es San Nicolás sino, dependiendo de la región, son el Weihnachtsmann (hombre de la Navidad) o el Christkind (niño Jesús) los encargados de esta tarea.

En el SEGUNDO domingo buscábamos una antigua región minera en Sajonia de la que provienen los adornos navideños de madera que vimos. Aunque era un poco más difícil, habéis hecho muy bien los deberes. Se trataba de la región entre Alemania y la República Checa conocida como Erzgebirge, o Montes Metalíferos en castellano. También eran válidas las respuestas con los nombres de algunas localidades pertenecientes a estos montes, como Seiffen o Altenberg, donde se producen muchos de estos adornos. He procurado que las respuestas pudieran encontrarse rápido y en páginas en castellano, como ya habréis visto, por ejemplo, buscando simplemente las pirámides de Navidad.

En el TERCER domingo nos acercamos a Núremberg donde cada año se celebra uno de los mercadillos más famosos de Alemania. Como muy bien habéis contestado todos, se trata del mercadillo Christkindlesmarkt o Mercadillo del Niño Jesús.

Y por último, la pregunta del CUARTO domingo que nos llevaba al final del viaje por Alemania, a la ciudad hanseática de Lübeck en el norte del país. La especialidad no es otra que el mazapán de Lübeck (y la famosa casa Niederegger) que disfruta junto a Toledo de una de las pocas denominaciones de origen para este producto.

Sois muchos los que habéis dado rápidamente con las respuestas o seguro ya conocíais. Creo que cuanto más sabemos de otras culturas, más cercanas nos parecen y mejor podemos entenderlas, y bueno, ya conocéis también el tema de este blog y la afición (casi maniática) de una servidora ;-D. Así que me dejo de rollos y vamos a lo más emocionante. Entre todos los correos con respuestas acertadas he realizado un sorteo: cada correo electrónico ha recibido un número por estricto orden de llegada. A falta de manos inocentes en esta casa para elegir al ganador, este bingo que utilizo en las clases de español para practicar los números me ha venido de maravilla.



Y.... tatachán... El ganador del Juego de Adviento 2008 ha sido el número 2:
¡Tartasacher, del blog Mil Postres!

¡ENHORABUENA!

Me hubiera encantado premiar a todos los participantes, pero este año y para variar ¡tampoco me ha tocado la lotería! A pesar de ello, y como agradecimiento por el enorme interés y los buenos ratos que me habéis hecho pasar, he decidido que voy a añadir dos premios pequeños de consolación que van a ser para:



El número 5, Cerise de Cerise divagando en la cocina
y el número 15, Isabel.

Me pondré en contacto también con vosotras en breve para que me enviéis vuestros datos.

Pues lo dicho, espero que os lo hayáis pasado tan bien como yo. Nos leemos probablemente el año que viene. Hasta entonces ¡mis mejores deseos para todos y mucha salud y felicidad!

miércoles, 24 de diciembre de 2008

domingo, 21 de diciembre de 2008

Juego # 4 - Cuarto Domingo de Adviento

Y ya hemos llegado al cuarto domingo de Adviento, no sé a vosotros, pero a mí se me ha pasado el tiempo volando, tanto que me voy a quedar con unas cuantas historias en el tintero... precisando, en el teclado. Para este cuarto domingo de Adviento nos he preparado otra tarde tranquila en casa, y siguiendo en la línea del Glühwein ¿qué tal si preparamos otro ponche mientras vemos el film "Die Feuerzangenbowle"?

4. Advent

Otra simpática tradición para una de las frías tardes de Adviento, o incluso para el día de Nochevieja, es reunirse para ver el clásico en blanco y negro "Die Feuerzangenbowle" (1944, Helmut Weiss) mientras se prepara el ponche que da nombre a la película. Como esto se repite cada año, la mayoría conoce de memoria los diálogos que siguen gritando en voz alta y al unísono. La película no tiene en sí tema navideño, pero debido al ponche que los protagonistas toman mientras se va desarrollando la historia, se ha convertido en un clásico de estas fechas. Un "Feuerzangenbowle" es un vino caliente y especiado muy parecido al Glühwein, la diferencia está en que en este el azúcar, que viene preparado en un cono especial, se quema con alcohol sobre una pinza (la Feuerzange) colocada sobre el recipiente, y va cayendo derretido al ponche.


Además del ponche, antes de cerrar esta serie sobre la Navidad germana me gustaría hacer un repaso por algunos de los dulces más tradicionales para estas fechas. Algunos ya los hemos conocido y probado, otros los dejaré aquí para los que quieran seguir investigando.

El primer domingo de Adviento lo empezamos por el Oeste del país, con un pie en las regiones de Renania y Westfalia, y otro en tierras holandesas (a la gastronomía no le va eso de las fronteras), donde nacieron los Spekulatius.

Spekulatius

Después nos fuimos al Este, hacia el estado de Sajonia, origen del famoso Stollen de Dresde, aunque naturalmente también es conocido en otras regiones y con otras sabrosas variaciones. Sajona es también la procedencia de los Pfefferkuchen de Pulsnitz, una de las muchas variaciones existentes del clásico pan de jengibre, miel y especias típico en muchas regiones del norte de Europa. Otro nombre para este tipo de pan es Lebkuchen. Si queremos encontrar los más famosos del país tenemos que poner rumbo al Sur, concretamente a Núremberg y a su mercadillo de Navidad (de cuyo nombre no quiero acordarme... jiji). Los Lebkuchen y yo todavía no hemos hecho buenas migas, nunca mejor dicho, será por eso que todavía no he probado a hacerlos, pero si queréis una buena receta no tenéis más que visitar el blog de Akane, por ejemplo :-D

Lebkuchen

Y de camino hacia el Norte, continuamos el viaje por la República Federal, una república con un rey, el "Rey de las tartas" o Baumkuchen. Literalmente bizcocho o tarta de árbol por su similitud con el tronco de un árbol y los anillos que se van formando con el paso del tiempo. Mediante la forma especial de horneado en un pincho que gira frente a una llama abierta se van formando anillos que recuerdan a los del tronco de un árbol. Este bizcocho es uno de los más antiguos documentados en Alemania. La fecha exacta de su creación no es conocida aunque se sabe que durante la Edad Media se hacían panes mediante este sistema. Las primeras recetas documentadas datan de mediados del s. XV. Otra variante de este pastel son los triángulos, más fáciles de preparar en casa con una receta como esta.

Baumkuchen

Y del Rey de las tartas a la Reina de la Hansa, la ciudad de Lübeck en el Norte a orillas del Mar Báltico y capital durante mucho tiempo de la Liga Hanseática, la alianza histórica de las ciudades del Norte de Europa que controlaba gran parte del comercio desde la Edad Media. La gran importancia comercial de Lübeck puede verse todavía hoy en su monumental casco antiguo declarado Patrimonio de la Humanidad. Hoy en día no se puede hablar de Lübeck sin pensar en su especialidad más conocida. Un producto de etimología aún discutida en alemán y con muchas leyendas y disputas en torno a su origen, entre ellas, una que nos lleva casualmente a la que fue capital española hasta el s. XVI, que al igual que Lübeck disfruta de una de las pocas Denominaciones de Origen para esta especialidad. Y esta es exactamente la cuarta y última (y de nuevo facilísima) pregunta de nuestro juego de Adviento:

¿Qué producto estamos buscando? ¿Cuál es la famosa especialidad de la ciudad de Lübeck?

Bueno, pues ¡ya está! Ya tenemos las cuatro preguntas y supongo que también las cuatro repuestas ¿no? Ya sabéis que tenéis tiempo hasta el 26 de diciembre para enviar vuestras respuestas en un correo electrónico a interculturaycocina@email.de. Os enviaré un mensaje de confirmación antes del sorteo y pocos días después veremos quién es el afortunado o afortunada ganador del Juego de Adviento 2008. Las normas del juego las podéis consultar aquí.

Y si todavía os quedan ganas de dulce, aquí os dejo algo muy sencillo de hacer.

Preguntas anteriores:

- Juego # 1 - Primer Domingo de Adviento
- Juego # 2 - Segundo Domingo de Adviento
- Juego # 3 - Tercer Domingo de Adviento

Patatas de mazapán

Los días previos a las fiestas empieza a notarse el estrés del año, y de las comidas y horas que se nos vienen encima en la cocina. Una cosa que me pareció curiosa en Alemania es que para muchas familias, y a diferencia de la comida de Navidad, la cena de Nochebuena es una cena muy sencilla. Uno de los menús tradicionales en muchas casas son las Kartoffelsalat mit Wiener, algo así como una ensaladilla rusa con salchichas cocidas. Con ello se pretende evitar el estrés añadido para la tarde en la que se intercambian los regalos, la misma tarde del día 24. El "Hombre de la Navidad" (Weihnachtsmann), como se conoce a Papá Noel es aquí el encargado de esta tarea (siempre hay un cuñado dispuesto a meterse en el traje acolchado y colgarse la barba), y si no se tiene cuñado a mano, se contrata a un estudiante que estará encantado de sacarse unas propinas (la misma universidad tiene un servicio de contratación y un programa especial para esta importante tarea). Es curioso salir a pasear la tarde de Nochebuena y encontrarse a Papás Noel apresurándose de casa en casa, en coche, en bicicleta o en transporte público.

Cuando el Weihnachtsmann llega a tu casa, si quieres tu regalo deberás recitarle un poema, cantarle una canción o demostrar tus dotes musicales. Como yo no sé hacer nada de esto, he decidido prepararle algo para comer (genes de mamma española, qué le vamos a hacer) que tampoco creo que le desagrade.

Y como el tiempo empieza a estar ajustado, nada como unas Marzipankartoffeln o patatas de mazapán, que se hacen en un pispás y seguro que le gustan.

Marzipankartoffel

Ingredientes

250 g de azúcar glasé
250 g de almendras molidas
la clara de 1 huevo
1 cucharilla de agua de rosas
1 cucharilla de ron
cacao en polvo
canela en polvo

Elaboración

Tamizar el azúcar glasé y mezclar bien con las almendras molidas. Añadir el ron y el agua de rosas. Batir ligeramente la clara de huevo e ir añadiendo a la mezcla anterior hasta obtener una masa a la que pueda darse forma fácilmente con las manos pero sin que quede demasiado seca. Hacer bolas del tamaño de una cereza. En una taza mezclar una cucharada de cacao en polvo y media cucharilla de canela en polvo. Pasar las bolas de mazapán por esta mezcla, darle un par de vueltas para que se cubran bien y ¡ya están listas para servir!

Receta para imprimir

domingo, 14 de diciembre de 2008

Juego # 3 - Tercer Domingo de Adviento

Ahora que ya tenemos los adornos de Navidad puestos y mientras el stollen sigue reposando, podemos aprovechar el tercer domingo de Adviento para darnos una vuelta por alguno de los mercadillos de navidad que no faltan estos días en ninguna ciudad alemana.

3. Advent

Durante la época de Adviento es tradición visitar al menos un mercadillo, los primeros abren a finales de noviembre y la mayoría cerrará después del cuarto domingo de Adviento y antes del día de Navidad. En las ciudades grandes hay mercadillos para todos los gustos, tradicionales, de artesanos, de ambiente medieval, y los más ruidosos con carruseles, montañas rusas y norias gigantes. En todos ellos pueden adquirirse los adornos navideños típicos, mientras vamos de puesto en puesto tomando una taza del famoso Glühwein, o vino caliente especiado (que además nos servirá para mantener las manos calientes) y llevamos los bolsillos llenos de paquetes de almendras garrapiñadas recién hechas.

Advent

Los mercadillos de navidad tienen una larga tradición. Eran los mercados en los que se podían adquirir pieles y lanas para el frío invierno, pero sobre todo especias para la cocina de esta época del año, como jengibre, clavo, canela o anís estrellado.

Uno de los mercados documentados más antiguos de Alemania es el de Dresde, fundado en 1434. Nació como mercado de un sólo día, originariamente se celebraba la víspera de Nochebuena y en él se podía adquirir todo lo necesario para la comida de Navidad. En el mercadillo de Dresde es tradición hornear cada año un stollen gigante. Es curiosamente el predecesor de este pan, un bollo llamado "striezel", el que da nombre al mercado de la ciudad: el Striezelmarkt.

Advent1

Un poco más al sur, ya en Baviera, podemos visitar uno de los mercadillos navideños probablemente más conocidos fuera del país, el mercado de Núremberg. En las regiones católicas de Alemania es común que sea la figura de Jesús la que deja regalos a los niños durante la Navidad, una figura curiosamente creada por Lutero y a la que los protestantes dieron más importancia tras la Reforma, pasando a sustituir a la figura católica de San Nicolás, encargado único por entonces de la tarea de los regalos. El nombre del mercado de Núremberg está muy relacionado con esta figura de tradición protestante, que hoy en día suele estar representada por una joven de aspecto angelical y cabellos dorados. Y relacionado está también con la pregunta para este tercer domingo de Adviento...

¿Cómo se llama el famoso mercadillo de navidad de Núremberg?

Bueno, creo que esta vuelve a ser fácil ¿no? En cualquier caso, muy fácil de encontrar. Como hoy nos vamos de mercadillo, nada mejor que ir entrando en calor con una taza de Glühwein, caliente y especiado...

Advent2

Y como siempre, para enviar las respuestas tenéis tiempo hasta el 26 de diciembre. Por favor, enviad las cuatro respuestas al final en un sólo correo electrónico. Las normas del juego las podéis consultar aquí.

Preguntas anteriores:

Caliente y bien especiado

En los mercadillos navideños al aire libre es como mejor sabe, calienta las manos primero, el resto del cuerpo después, y si no se tiene cuidado, la cabeza a la mañana siguiente.

En casa, sin el barullo de la multitud y preparado al gusto de cada uno, promete acogedoras tardes de Adviento.

Glühwein

Vino caliente especiado o Glühwein

1 botella de vino tinto
2 ramas de canela
8-10 clavos
2 flores de anís estrellado
la cáscara de 1 limón
la cáscara de 1 naranja
2 cucharadas de azúcar

Elaboración

Poner todos los ingredientes menos el azúcar en una cazuela y calentar a fuego medio-bajo hasta que humee. Añadir el azúcar, dejar que se disuelva y servir.

Es muy importante que el vino no llegue a hervir. Para evitar que se enturbie, es preferible utilizar especias enteras en lugar de en polvo. Probar antes de servir y ajustar la cantidad de azúcar al gusto, al igual que las especias.

Receta para imprimir

domingo, 7 de diciembre de 2008

Juego # 2 - Segundo Domingo de Adviento

Al encender hoy nuestra segunda vela de Adviento no he podido evitar recordar la historia de la corona y, sobre todo, el significado de los elementos que la componen: el verde de las ramas y la luz de las velas. El significado de estos dos elementos se remonta a costumbres y creencias paganas muy antiguas donde se empleaban como protección frente a los malos espíritus durante la época más oscura del año. La mayoría de los adornos navideños que conocemos actualmente son el resultado del contacto entre diferentes culturas que con el tiempo acabaron fundiendo sus tradiciones y cuyo significado fue transformándose. Mientras el verde de las ramas solía utilizarse más en el sur y en el oeste de Europa, el poder de la luz aportado por las velas, era la forma utilizada por los pueblos del norte y el este de Europa para ahuyentar a los malos espíritus.

2. Advent

La vela de la corona se suele encender a eso de las cuatro de la tarde, la hora del café, que en muchas familias alemanas es la reunión que se celebra con mayor ambiente festivo. Hay que tener en cuenta que a esta hora, y durante los meses de noviembre y diciembre, en la mayor parte de Alemania ya ha anochecido completamente.

Pero bueno, que me voy por las ramas de abeto... yo venía hoy a hablar de algunos de los adornos navideños que encontramos en la Navidad alemana. Además del árbol, probablemente el ornamento más popular en todo el mundo, cada país o región tiene sus tradiciones para la decoración navideña. Por estas tierras encontraremos el origen de muchos de los adornos navideños típicos en Alemania en el estado de Sajonia.

Entre las familias mineras de la región existía la costumbre de poner velas en las ventanas de las casas para indicar el camino de vuelta al hogar a los hombres que volvían de trabajar en la mina durante las oscuras noches de invierno. De esta forma, no sólo querían iluminarles el camino de vuelta a casa, sino que era también un bonito gesto para decirles que la familia les esperaba y, sobre todo, que se alegraba de su vuelta. Esta costumbre fue evolucionando, se empezaron a adornar cada vez más los soportes de madera para las luces hasta convertirse en los adornos actuales, una especie de candelabro en forma de arco y adornado con figuras, los populares Schwibbögen, que podemos ver desde los primeros días de Adviento y hasta pasada la Navidad en las ventanas de muchas casas.

Schwibbogen

Con el cierre de las minas durante el siglo XIX, estas familias se vieron obligadas a buscar una nueva forma de sustento. La necesidad hizo que la talla y el torneado de madera que los mineros practicaban entonces en sus ratos libres empezaran a evolucionar y pasaran a convertirse en una de las principales fuentes de ingresos. De entre todos los elementos decorativos que empezaron a crear, quizás el más famoso, popularizado por el ballet basado en un cuento original de E.T.A. Hoffmann, sea el cascanueces de madera. Estos cascanueces son figuras que suelen representar a personajes de las autoridades de la época como guardias, guardabosques, soldados o reyes. Personajes de la vida pública que debían infundir respecto, por eso estas figuras tienen una expresión muy seria, que hasta da un poco de miedo, además de una boca muy grande (el cascanueces en sí accionado por una palanca en la parte de atrás).

Nussknacker

Además de los cascanueces surgieron otras figuras como los curiosos Räuchermännchen u "hombrecillos que fuman", que representan oficios tradicionales. Entre ellos hay mineros, zapateros, herreros, etc. No son otra cosa que originales quemadores de incienso que producen un efecto muy divertido, lógicamente muy populares entre los niños. Dentro de los hombrecillos se coloca una "piedra" de incienso que se quema. Al cerrar la figura el humo sale por el pequeño orificio de la boca y parece que el hombrecillo está fumando. Este es mi zapatero favorito:

Räuchermann

Se cree que los orígenes del árbol de Navidad están en un elemento utilizado en Centroeuropa durante estas fechas, una estructura de cuatro varas de madera sujetas a una base y unidas por la parte superior a las que se ataban ramas verdes de árbol y se adornaban después con luces. En las grandes ciudades evolucionaría hasta convertirse en el árbol de Navidad. Sin embargo, en las regiones más pobres y entre las familias que se habían especializado en la talla en madera, este elemento fue modificándose hasta convertirse en uno de los adornos navideños más populares en Alemania, la pirámide de Navidad.

Weihnachtspyramide
Weihnachtspyramide

Se trata de un carrusel de madera con una hélice en la parte superior que gira mediante el calor de las velas colocadas en la base y mueve las figuras del interior (ver vídeo). Hay pirámides de uno, dos, tres o más pisos, decoradas con figuras y escenas navideñas en su interior. En muchas ciudades se instala una pirámide gigante en los mercados navideños.

Todos estos adornos son, junto con el árbol de Navidad o las estrellas de Moravia, los clásicos de la Navidad en Alemania. Todos ellos tienen un origen común, una región minera en el estado federal de Sajonia. Así que os estaréis imaginando ya la pregunta para el segundo domingo de Adviento:

¿Cómo se llama la región de la que provienen estos adornos navideños como la pirámide de navidad, el cascanueces, los hombrecillos que fuman o el arco de luces?

¿Un poco más difícil que la anterior? ¡Ya veréis como no! Para celebrar el segundo domingo de Adviento, y por haber llegado hasta aquí, todo hay que decirlo, os dejo unos pastelillos de stollen y un café.

Ya sabéis que para enviar las respuestas tenéis tiempo hasta el 26 de diciembre. Por favor, enviad las cuatro respuestas al final en un sólo correo electrónico. Las normas del juego las podéis consultar aquí.

Preguntas anteriores:

- Juego # 1 - Primer Domingo de Adviento

Stollenkonfekt o pastelillos de stollen

No tenemos que irnos muy lejos del lugar de nacimiento de la pirámide de navidad o del cascanueces para encontrar otra dulce especialidad alemana navideña: el Stollen de Dresde. Este pan de frutas pariente del panettone italiano o del fruitcake de los países anglosajones, por poner sólo dos ejemplos, es el dulce navideño por excelencia en Alemania. Cada región tiene su variante y diferentes nombres, pero es el Christstollen de Dresde el primero en conseguir la denominación de origen.

Curiosa es la historia del stollen, pan creado en un principio para el ayuno durante la época de Adviento. La nobleza de la época, a la que el pan le parecía muy seco, solicitó a la Iglesia un permiso especial para que los panaderos pudieran incluir manteca y leche, prohibidos durante época de ayuno. El Papa Inocencio VIII creó la denominada "Carta de la manteca" que permitía el uso de mantequilla a cambio del pago de un diezmo (ya se sabe... ¡con quién hemos topado!).

Stollenkonfekt

Preparar este pan lleva tiempo y paciencia. La preparación de todos los ingredientes, varias horas de reposo de la masa y de una, como mínimo, a varias semanas de reposo tras el horneado. Este año, otra vez, me pilló el toro, pero espero que para Navidad haya "madurado".

Ingredientes
300 g harina - 30 g levadura de panadero - 125 ml leche - 60 g azúcar - 1 cucharilla azúcar avainillado - ralladura de medio limón - 140 g mantequilla - 60 g almendras molidas - 60 g frutas confitadas (naranja y limón) - 150 g pasas sultanas - 65 g pasas de Corintio - sal, ron, azúcar y azúcar glasé

Elaboración
La víspera de la cocción ponemos las pasas en remojo con el ron y las dejamos toda la noche en un lugar templado. Al día siguiente hacemos una masa previa, para ello tomamos más o menos dos terceras parte de la harina, hacemos un hueco en el centro y añadimos la levadura diluida en la leche templada y una cucharilla de azúcar. Trabajamos bien la masa, la tapamos y la dejamos reposar hasta que haya doblado su tamaño y la superficie empiece a agrietarse, al menos 1 hora. Entonces añadimos a la masa previa el resto de la harina, el azúcar, el azúcar avainillado, la ralladura de limón, una pizca de sal y la mantequilla (que previamente hemos dejado ablandar a temperatura ambiente ¡no derretida al fuego!) y, si es necesario, un poco más de leche templada hasta conseguir una masa blanda pero que no se pegue a las manos. Ponemos entonces las almendras, la fruta confitada y las pasas que teníamos en ron. Tapamos la masa de nuevo y la dejamos reposar otras 2 horas en un lugar templado. Volvemos a amasar brevemente y a dejarla otros 30 minutos. Transcurrido este tiempo podemos formar ya los stollen. Para los pastelillos individuales hacemos un rodillo con parte de la masa y después cortamos trozos del tamaño deseado a los que hacemos un pequeño corte longitudinal por la parte de arriba. Para el stollen tradicional le damos a la masa forma de hogaza alargada, ensanchamos un poco por el centro y doblamos una mitad sobre la otra en longitudinal sin llegar a unir los dos bordes sino dejando un poco de separación a modo de escalón.
Colocamos el stollen en una placa de horno con papel antiadherente y lo dejamos reposar 10 minutos más, mientras el horno se precalienta a unos 140º C. Metemos el stollen y lo horneamos durante unos 60-70 minutos, controlando de vez en cuando que no se queme.

Stollen

Cuando estén hechos, los sacamos y los untamos con mantequilla derretida, espolvoreamos primero una capa fina de azúcar y después una gruesa de azúcar glasé. Y ahora viene la parte más difícil, ya que el stollen debe reposar un mínimo de 7 días, lo ideal son un par de semanas o más envueltos en un paño de algodón o lino, para que el pan se impregne bien de todos los aromas.

Receta para imprimir

martes, 2 de diciembre de 2008

Buscar recetas en blogs de cocina

Cuando busco recetas de cocina en la red, suelo mirar primero los resultados de búsqueda que me llevan a un blog. Estas recetas tienen un toque personal, detrás de ellas hay gente que ha puesto mucho cariño en hacerlas, fotografiarlas y contarlas, y son además una gran fuente de historias.

Hace poco descubrí una sencilla herramienta, muy útil para buscar recetas de cocina exclusivamente en blogs escritos en español, de esta forma evitamos largos resultados de búsqueda en páginas comerciales. Marcela, quien además de tener un bonito blog de cocina escrito desde el hemisferio sur, se encarga de administrar el motor de búsqueda en su versión en español, me ha explicado que «la idea es poder buscar entre las recetas probadas por otra gente; encontrarse con notas personalizadas, comentarios sobre el resultado y demás observaciones que hacen a la "vida" de una receta».


Podemos buscar la receta directamente en la página de inicio Búsqueda de Blogs de Cocina o añadir una barra de búsqueda a nuestro blog. La idea original era sólo para blogs en inglés, actualmente existen también versiones para blogs en francés y en portugués.
Y si queréis añadir vuestro blog de cocina al motor de búsqueda, aquí encontraréis información sobre cómo hacerlo.

domingo, 30 de noviembre de 2008

Juego # 1 - Primer Domingo de Adviento

¡Yuuuuuppi! Ya llegó la hora, llegó el Juego de Adviento y por fin podemos encender la primera vela de Adviento. ¿Falta alguien? ¿estamos todos? ¡Apretujaos un poco para que quepamos todos! ¿Preparados? ¡Pues vamos allá!

1. Advent

La primera historia nos lleva a la actual Turquía donde en el siglo IV vivió un hombre joven procedente de una familia adinerada que en seguida destacó por su carácter piadoso y generoso. Nuestro joven llegaría más tarde a ser obispo e incluso a ser santificado. Las leyendas y milagros que se le atribuyen son el origen de algunas de las costumbres navideñas que siguen celebrándose hoy en muchas partes del mundo.

Una de esas leyendas cuenta que, un día, a oídos de nuestro joven llegó la historia de un padre que no tenía suficiente dinero para pagar la dote de sus tres hijas, por lo que las jóvenes no podían contraer matrimonio, y estaban entonces condenadas (¡eran otros tiempos!) a un futuro incierto. Cuando nuestro joven se enteró de su situación, decidió ayudarlas. Al llegar la noche, y pretendiendo realizar la caridad sin ser visto, se acercó a la casa de las tres jóvenes, entró por la ventana y colocó unas monedas de oro dentro de unas medias de lana que colgaban para secar sobre la chimenea. De esta forma ayudó a las tres jóvenes casaderas proporcionándoles la dote con la que podrían casarse.

Se cree que de esta leyenda sobre la caridad del joven, más tarde conocido como San Nicolás de Bari (o Nicolás de Myra en Oriente), surgió la tradición navideña de dejar los calcetines o los zapatos preparados para los regalos. Este entrañable personaje, que en Holanda se llama Sinterklaas, fue llevado a los Estados Unidos por emigrantes holandeses donde, con el paso del tiempo, pasó a llamarse Santa Claus.

En Alemania San Nicolás es también muy popular y muy esperado por los niños que le conocen con el nombre de Heiliger Nikolaus. Hay también una noche al año, durante los días de Adviento, en la que Nicolás se pasa por las casas de los peques y, si se han portado bien ¡claro está!, les deja una bolsa con pequeños regalos, normalmente frutos secos, mandarinas, chocolate, galletas de especias y dulces navideños, pero...

¿Sabéis qué día es? ¿Cuándo se levantan en Alemania los niños ilusionados esperando encontrar los regalos de San Nicolás?

1. Advent

Y esta es la primera pregunta ¡qué fácil es! ¿no? Pero cuidado, no os dejéis llevar por otras tradiciones navideñas que he mencionado y que quizás son más conocidas en otros países. Si no tenéis la respuesta a mano, estoy segura de que buscando un poco la encontraréis. Podéis husmear también en alguno de los blogs de mis vecinos centroeuropeos, seguro que allí también encontráis alguna pista ;-D

Para enviar la respuesta tenéis tiempo hasta el 26 de diciembre. Por favor, enviad las cuatro respuestas al final en un sólo correo electrónico. Las normas del juego las podéis consultar aquí.

No os marchéis sin probar las galletas que he hecho para nuestro primer domingo de Adviento. A continuación os dejo también la receta.

Galletas para tiempos de especulación

Entre los dulces que los niños reciben el día de San Nicolás hay unas galletas de canela típicas de la época navideña: los Spekulatius, cuyo nombre, aunque hay varias teorías, dice el saber popular que hace referencia al mismo San Nicolás del que ya hemos hablado. Para la preparación de estas galletas, originarias de Bélgica, Holanda y de las regiones alemanas fronterizas de Renania y Westfalia, se usa un tipo de masa quebrada muy especiada con canela, clavo, cardamomo, nuez moscada y en Holanda también jengibre. Las galletas Spekulatius se caracterizan por las originales formas con relieves de escenas invernales y navideñas, entre ellas también, la figura de San Nicolás.


Spekulatius


Yo utilicé otros moldes que tengo, bastante más sencillos, y aunque las galletas Spekulatius de especias se caracterizan por sus formas también lo hacen por su sabor especiado, sobre el que predomina la canela, el sabor de la Navidad alemana. ¡Así que cualquier molde para galletas que tengáis vale! Era la primera vez que probaba esta receta y tengo que decir (hoy no voy a escatimar en vanidad ;-) que quedaron buenísimas. Además, podemos emplear la misma masa como base para diferentes galletas y adornarlas a gusto con frutos secos o diferentes coberturas, guardarlas después en una lata que nos guste y ¡ya tenemos un bonito regalo de Navidad! Económico y hecho con mucho cariño :-D

Ingredientes:
(Salieron dos bandejas de horno)
150 g azúcar - 125 g mantequilla - 1 huevo -250 g harina - una pizca de clavo molido - una pizca de cardamomo molido - una pizca de nuez moscada - 1/2 cucharilla de canela - un pizca de sal


Spekulatius

Spekulatius

Elaboración

Mezclar bien el azúcar con la mantequilla que habremos dejado unas horas a temperatura ambiente. Añadir el huevo y batir todo bien hasta obtener una crema. Añadir después las especias y la harina (menos un par de cucharadas que utilizaremos después para enharinar la superficie de trabajo y las galletas) y amasar bien. Hacer una bola, enharinar y dejar al menos una hora en la nevera, y si tenéis tiempo, toda la noche para que la masa se impregne bien de las especias (yo tuve que aplazar la elaboración y la tuve dos noches en la nevera, creo que el resultado fue aún mejor). Cuando haya reposado, espolvorear la superficie de trabajo con harina y extender la masa con el rodillo hasta que tenga un grosor de unos 4-5 mm. Cortar con las formas y moldes elegidos. Introducir en el horno precalentado a 200º C y cocer durante unos 10 minutos. Sacar y dejar enfriar (algo que requiere una gran fuerza de voluntad).
También podemos añadir a la base almendras laminadas que colocamos en la superficie sobre la que vamos a estirar la masa.

sábado, 22 de noviembre de 2008

El juego de Adviento

Desde finales de noviembre y hasta Navidad Alemania desprende aroma a galletas recién horneadas, a canela y a panes de especias. Es la época de la "Gemütlichkeit", del ambiente acogedor y de la luz de las velas, del frío en la calle y de los días más cortos del año. Es el período de Adviento que empieza cuatro domingos antes de la Nochebuena. Durante los domingos de Adviento es costumbre invitar a amigos y a familiares a tomar té o café y a comer dulces y galletas caseras.

Se atribuye a Johann Hinrich Wichern (1808–1881), teólogo protestante luterano y fundador del orfanato "Raue Haus" en Hamburgo, la creación en 1839 de un elemento hoy en día esencial en los hogares alemanes durante el tiempo de Adviento: la Corona de Adviento. Al acercarse la Navidad, los niños del orfanato "Raue Haus" no dejaban de preguntar ilusionados cuántos días quedaban para Nochebuena. Para que los niños pudieran contar los días, y amenizarles al mismo tiempo la espera, el teólogo construyó una corona especial: sobre una antigua rueda de madera colocó 19 velas rojas pequeñas y 4 velas blancas grandes. Al llegar el Adviento, los niños tenían que encender una vela pequeña cada día y una vela grande los domingos.

Adventskranz

De esta idea nació la corona actual de cuatro velas que se van encendiendo consecutivamente los domingos de Adviento. La corona también se adorna con ramas de abeto, incorporando así elementos de costumbres paganas mucho más antiguas, como el verde de las ramas de árbol o la luz de las velas (mismos elementos del árbol de Navidad). La corona de Adviento se hizo popular a principios del siglo XX y es desde entonces una de las costumbres previas a la Navidad más extendidas en los países de habla alemana.

Juego de Adviento

Este año me encantaría celebrar los domingos de Adviento con vosotros, encender cada domingo una vela y compartir una historia alrededor de la corona. Para ello he pensado organizar un juego: el Juego de la Corona de Adviento. Las reglas son muy fáciles:

Siguiendo la tradición, cada domingo de Adviento encenderemos una vela. Al mismo tiempo aparecerá una historia nueva en el blog sobre la Navidad en Alemania y sobre las costumbres tradicionales y gastronómicas durante esta época. Tras cada historia encontraréis una pregunta relacionada que, con un poco de atención y otro poco de curiosidad, será muy fácil de contestar. Cuando hayamos encendido las cuatro velas de Adviento, y tengamos las cuatro entradas con sus cuatro preguntas, podéis enviarme las respuestas en un correo electrónico. Entre todos los que hayáis contestado correctamente a las cuatro preguntas (y que como sé que mis lectores son muy listos, seréis todos) sortearé un regalo, un pequeño paquete con algunas cosillas ricas típicas de Alemania (y quizás de algún otro sitio, ¡podéis husmear un poco por el blog!) y que me comprometo a enviar a cualquier lugar del mundo (por favor, cualquier lugar ¡que tenga servicio de correo postal!).

Para participar, el único requisito es tener ganas, estar un poco atento/a a las historias de los cuatro domingos de Adviento y enviar un correo electrónico con las respuestas correctas, para ello ¡no hace falta tener un blog! ¿Os apetece?

EN RESUMEN:
  • Período de envío de respuestas:

    Hasta la medianoche del viernes 26 de diciembre de 2008, 12 am (GMT+1)
  • Por favor, enviad las cuatro respuestas en un sólo correo electrónico (y no a través de los comentarios) a: interculturaycocina@email.de
Adventskranz_Banner

Si queréis anunciar el juego en vuestro blog (y darle un poco de publicidad, gratuita todo sea dicho ;-), podéis incluir el siguiente código:


NOTA: Las bases de este juego-concurso están guardadas bajo la almohada de mi cama y ¡ay de aquel o aquella al que se le ocurra hacer trampa!

viernes, 21 de noviembre de 2008

Ya está aquí

El invierno ha querido mostrarse con sus mejores galas exactamente un mes antes de su entrada oficial, quizás como regalo de cumpleaños para el poeta y para el fotógrafo.

First Snow

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Los deberes

Cuando una lleva haciendo lo mismo durante mucho tiempo, acaba perdiendo la perspectiva. Confieso que alguna vez he sido injusta con mis pobres estudiantes de español (adultos hechos y derechos que corren a clase de español después de una larga jornada de trabajo) cuando se equivocaban al utilizar estructuras gramaticales que en realidad son idénticas en su idioma. "¡Por qué narices no ven que es igual!" pensaba cabreada. O les he echado alguna que otra reprimenda porque no habían hecho los deberes.

Hace tiempo me apunté a clases de chino y... ¡heme ahí! metiendo la pata sin cesar, y hasta la saciedad, en cosas que son igual en la gramática castellana o malhaciendo los deberes, en el mejor de los casos, cinco minutos antes de la clase. No hay nada como ver las cosas desde la otra orilla. Chino no sé si aprenderé, pero creo que desde entonces mis estudiantes son más felices, vuelvo a comprenderlos.

Este mes he sido buena y vengo con los deberes hechos a tiempo. Los que nos puso Ivana de My little things y que presento para la propuesta del HEMC #27 de este mes.

Canelones al vapor

Cannelloni

Ingredientes
300 g de carne magra picada (cordero o ternera)
1 cucharada de arroz
1 cebolla mediana
1 cucharada de piñones
1 cucharada de mezcla de especias (yo usé pimienta, canela, clavo molido y cúrcuma)
pasta de canelones

Preparación
Salpimentamos bien la carne picada y añadimos la mezcla de especias. En una sartén a fuego medio freímos, sin que llegue a dorarse, la cebolla que antes hemos picado muy fina. Antes de sacarla añadimos los piñones y los salteamos dos minutos con la cebolla que vamos a mezclar después con la carne picada. Finalmente añadimos la cuchara de arroz. Yo preparé la carne picada el día anterior para que se impregnara bien de las especias. Cuando tengamos la carne lista, rellenamos con cuidado los canelones que colocamos después en un recipiente preparado para cocción al vapor. Hervimos una media hora (controlamos que la pasta esté hecha) y sacamos con cuidado de que no se rompan.

Podemos servirlos con una ensalada y aliñar todo con aceto balsámico. Al cocer al vapor, la carne suelta la grasa que lleva y queda en el agua de cocción. El arroz crece y evita en parte que el relleno se reduzca mucho y no "llene" los canelones.

Receta para imprimir

martes, 11 de noviembre de 2008

Berlinesas

Hoy, 11 de noviembre a las 11 y 11 minutos empieza oficialmente el Carnaval en Alemania. Una tradición que se remonta a la cuaresma previa al nacimiento de Cristo y que también guarda relación con el Día de San Martín.

Como ya conté una vez, el noreste de Alemania es de confesión mayoritariamente protestante y celebra, por lo general, pocas fiestas religiosas. En Berlín concretamente el Carnaval apenas se siente, lo único que recuerda su inicio el 11 de noviembre son los adornos en la panaderías que anuncian con gran colorido la especialidad para la ocasión: la berlinesa.

Berliner Pfannkuchen

La berlinesa (Berliner, en alemán) se conoce con este nombre en casi toda Alemania y en muchos otros sitios, menos en la ciudad que probablemente la vio nacer, donde se llama Pfannkuchen, lo que puede llevar por su parte a confusiones ya que Pfannkuchen es en otras partes crêpe o pancake, para lo que los berlineses utilizan Eierkuchen.

Los Pfannkuchen berlineses pueden encontrarse actualmente durante todo el año, aunque las fechas tradicionales para comerlos son Carnaval y Nochevieja, donde es costumbre también rellenar algunos de ellos con mostaza y mezclarlos con los otros.

Existe una leyenda sobre la famosa frase "Ich bin ein Berliner" o "Soy un berlinés" que John F. Kennedy pronunció en el balcón del Ayuntamiento del barrio de Schöneberg (entonces Ayuntamiento del Berlín Occidental) según la cual Kennedy supuestamente se equivocó al utilizar el artículo (no es así) y el significado de la frase fue "Soy un dónut relleno". Aparte de ser gramaticalmente correcta, está claro que un berlinés nunca podría malinterpretar la frase, ya que ningún berlinés llama a este dónut relleno de mermelada Berliner sino Pfannkuchen.

Berliner Pfannkuchen

lunes, 3 de noviembre de 2008

Al pan, pan...

Si hay una especialidad gastronómica de la que los alemanes están orgullosos, esa es el pan. Se jactan, y no sin razón, de tener más de 300 tipos diferentes de panes. Un extranjero no instruido en el tema (léase servidora) necesita una eternidad para diferenciar los tipos de panes según las clases de harinas y los cereales empleados, o las diferentes temperaturas de cocción que lleva cada pan.

La segunda dificultad a la que se enfrenta el extranjero es la de aprenderse todos esos nombres para pedir correctamente el pan correspondiente, nombres que muchas veces guardan poca o ninguna relación con lo que podría ser su elaboración, como por ejemplo, el panecillo "campeón del mundo" (Weltmeister) o el "aprendiz de zapatero" (Schusterjunge). Sin mencionar las variantes regionales para el simple panecillo o Brötchen, que en Berlín es Schrippe, en el sur, Semmel, etc.

Pumpernickel
Pumpernickel

Recién llegada a estas tierras y en busca del famoso pan negro fui a dar con el Pumpernickel, que por entonces yo consideré como el "más alemán" por ser, quizás, el de aspecto más diferente a los que conocía. Y fue así que me dispuse a probarlo acompañando la comida, según mi por entonces entendimiento del pan (para mojar, vamos). ¡GRAN ERROR! Este tipo de panes contundentes, como diría alguno, no están hechos para mojar, para este fin, la cocina alemana tiene otras cosas ricas como los Knödel o los Klösse. Y de ahí que las comidas, rara vez se acompañen con pan.

Muchos de los panes tienen demasiada personalidad para ser empapados con otros sabores, necesitan ser el protagonista de la comida, por eso algunas de las comidas del día son sencillamente eso "pan con... (queso, embutidos)" y tienen denominaciones tan estupendas como Pausenbrot ("pan del recreo", almuerzo de los niños en el colegio), Abendbrot ("pan de la tarde", sinónimo de cena), o Brotzeit en Austria ("la hora del pan").

La diferencia es una cuestión de uso y no de formas. Como ejemplo curioso el uso, a mi parecer sólo funcional, del pan como soporte para la salchicha.

Bratwurst

Si no fuera porque lleva kétchup o mostaza, y porque quema, creo que se ahorrarían el pan. De hecho, es común ver a niños pequeños en cochecitos rechupeteando una salchicha tipo Frankfurt que las madres llevan en tuppers, sin pan.

En fin, tras todas estas filosóficas y profundas divagaciones de hoy, ¡a ver quién adivina qué suelen echar en falta los alemanes cuando viven en el extranjero!

martes, 21 de octubre de 2008

Tarta del bien y del mal

Ahora que estamos de vacaciones, ayer empezaron en Berlín las Herbstferien -vacaciones escolares de otoño- hay tiempo para encender el horno y dedicarlo a la elaboración de trabajosos postres. Ha habido dos hechos que han confluido en la elaboración de esta tarta: primero, esta Tarta del pecado original, que incumpliendo el décimo mandamiento codicié desde el primer momento, y segundo, la enorme cesta de manzanas recién cosechadas que nos ha llegado desde la Alta Lusacia.

Quince & Apples
Una pena que ese hermoso membrillo saliera malo al abrirlo

Ingredientes
Para la masa quebrada: 200 g de harina - 100 g de mantequilla - 50 g de azúcar glasé - 1 huevo - una pizca de sal
Para el relleno: 4 ó 5 manzanas medianas - 1 puñado de frutos secos (pasas, piñones, arándanos) - canela - azúcar moreno

Apple Pie

Elaboración
Para la masa, tamizar la harina con el azúcar glasé. Poner en un cuenco y añadir la mantequilla, que habremos dejado a temperatura ambiente durante un par de horas fuera de la nevera para que esté blanda. Mezclar con los dedos sin amasar mucho y añadir la sal y el huevo. Unir bien todos los ingredientes. Hacer una bola, cubrirla con film transparente y dejar reposar en la nevera durante 1 hora.

Mientras tanto pelar y cortar las manzanas en rodajas finas. Poner en un cuenco y añadir las frutas secas, el azúcar y la canela. Darle un par de vueltas para mezclar con las manzanas y dejar reposar para que los aromas se impregnen bien. Yo añadí también un chorro de sirope de arce.

Cuando la masa esté lista dividir en dos partes (una un poco mayor que la otra, gracias Arantza ;-). Tomamos la parte más grande y la estiramos cuidadosamente con el rodillo. Yo la estiro sobre un trozo de film transparente o papel de hornear para poder después levantarla fácilmente, doblarla y colocarla sobre el molde. Al estirar la masa de la base debemos calcular unos centímetros para hacer también un borde. Introducir la base, ya en el molde, en la nevera. Para la cubierta estirar de igual forma la parte restante de la masa y cortar con los moldes elegidos. Poner las formas hechas sobre una bandeja también en la nevera para evitar que se deformen con el calor.

Apple Pie

Precalentar el horno a 230 ºC. Sacar la base de la tarta de la nevera y repartir uniformemente la mezcla de las manzanas, que habrán soltado algo de jugo, sobre la base de la tarta. Para acabar de montar la tarta hacemos una cubierta con las figuras que hemos preparado antes y la pintamos con yema de huevo. Introducir en la parte baja del horno precalentado a unos 230 ºC. Transcurridos 10 minutos reducir la temperatura a 180 ºC y hornear unos 70 minutos más. Si la superficie se dora demasiado rápido, puede cubrirse la tarta con papel de aluminio que volveremos a quitar antes de sacar para que la superficie acabe de dorarse.

Receta para imprimir

Apple Pie

El pecado de la tarta codiciada me ha hecho pensar en una película que vi hace tiempo: Las manzanas de Adán (Adams æbler, 2005) del danés Anders Thomas Jensen. En esta historia, un párroco protestante de una pequeña iglesia de la provincia danesa tiene a su tutela a un pintoresco grupo de personajes que intenta reintegrar en la sociedad volcando para ello su infinito amor al prójimo. Entre los personajes, un violador cleptómano y alcohólico, un atracador de gasolineras árabe y el último recién llegado, Adán, un violento neonazi. Como parte del proceso de reintegración, Adán debe cumplir una tarea y decide hacer una tarta de manzana con los frutos del manzano del jardín. La tarea resulta más complicada de lo que en un principio parecía y Adán y su tutor se verán enfrentados a una gran prueba.

La película tiene innumerables alusiones bíblicas, reflexiones sobre el bien y el mal y sobre la fe. Personalmente, es una película excelente con un tema complicado de tratar que es resuelto con gran humor, eso sí (¡y advierto!) humor negro al estilo danés, política (y totalmente) incorrecto y lo mejor, sin pretensiones evangelizadoras.

Ver tráiler

miércoles, 15 de octubre de 2008

Liebe geht durch den Magen...

... o el amor entra por el estómago, dice un dicho popular en alemán.

Así que aquí va un poco de amor (que me he permitido tomar de aquí), aliñado con cariño traído desde aquí. ¡Uy, qué romántica estoy hoy!

Gratinado de calabacín, boniatos y peras

Gratin

Ingredientes

2 boniatos - 2 calabacines - 2 peras - 200 ml de crema agria (crème fraîche) o nata - 1 diente de ajo - 100 g de queso rallado (yo he mezclado Emmental y feta) - hierbas aromáticas (tomillo, romero) - nuez moscada - sal & pimienta

Preparación

Pelar los boniatos, hervirlos 10 minutos al vapor y dejar que enfríen antes de cortarlos en rodajas. Precalentar el horno a 210°C. En una fuente de horno ligeramente engrasada con mantequilla colocar rodajas de boniato, calabacín y pera, y aliñar con un buen chorro de aceite de oliva. Calentar aparte la crema, sin que llegue a hervir, con el diente de ajo machacado, las hierbas, la nuez moscada y salpimentar. Cubrir la fuente con la crema y espolvorear con el queso rallado. Hornear durante unos 45 minutos o hasta que la superficie esté dorada.

lunes, 13 de octubre de 2008

Hace eso de un año...

Allá a principios del otoño pasado se me ocurrió empezar a escribir un blog. El primer problemilla con el que me topé fue ¿y sobre qué **** escribo yo?... ¡Ah! Podría por fin poner todas mis recetas online, esas que tengo apuntadas en trozos de papel y que acaban perdidas entre libros y estantes. Superada esta insignificante duda sobre el qué escribir me puse manos a la obra. Y llegó el segundo obstáculo: ¿Qué nombre desea ponerle a su blog? ¡Hm! ¿Nombre? Vamos a ver... va de recetas, o sea que algo de cocina, pero queda muy soso... ¿y algo intercultural? Al fin y al cabo es a lo que me dedico y ... todavía mejor, la palabrita está muy de moda y queda la mar de bien. Y así fue como tras profundas divagaciones, este bloguillo comenzó su andanza... que como bien dijo el poeta, camino se hace al andar. Y en el camino he conocido a gente maravillosa, entablado nuevas amistades y aprendido un montón.

Hoy, y para celebrar ese primer aniversario de andanza, hemos hecho limpieza en casa y estrenado nuevas galas. Espero que nos sigamos encontrando por el camino.

¡GRACIAS POR ESTAR AHÍ!

domingo, 5 de octubre de 2008

Sabor de otoño

El otoño trajo consigo la caída de las hojas, las mantas en las terrazas de los cafés, las tartas de cebolla y el federweisser tras la primera vendimia.

Autumn

El federweisser es el mosto de una uva muy dulce que se bebe cuando ha empezado a fermentar y antes de hacerse vino. Como la fermentación está en pleno proceso, el mosto sigue creando dióxido de carbono, por eso la botella no debe estar cerrada herméticamente, ya que explotaría, y el transporte debe realizarse con cuidado y estar siempre en vertical. Es un vino suave, dulzón, refrescante y muy, muy cabezón, que debe consumirse rápido.

En Alemania el otoño no sabe a otoño hasta que llegan el federweisser y los pasteles de cebolla. Creo que me podría alimentar todo el otoño... y parte del invierno a base de estas dos cosas.

Flammkuchen & Federweisser

Tarta de cebolla a la alsaciana (Flammkuchen)
(Ingredientes para tres personas, o dos con buen apetito, salen casi tres bandejas de horno. Al ser la masa muy fina, las porciones parecen más grandes de lo que son.)

500 g de harina - 21 g de levadura fresca - 300 ml de agua - 300 g de panceta - 2 cebollas grandes - dos dientes de ajo - 400 g de crema fresca (crème fraîche) - sal - nuez moscada y pimienta - cebollino o perejil

Elaboración

Diluir la levadura fresca en un poco de agua templada para activarla. Añadir a la harina tamizada la levadura con el resto del agua y un poco de sal, y amasar bien. Dejar reposar en un lugar templado durante al menos 30 minutos hasta que la masa haya doblado su tamaño. Mientras tanto cortar las cebollas en aros y la panceta en tiras finas. Machacar un ajo y mezclarlo con la crema, añadir nuez moscada, pimienta y un poco de cebollino o perejil picado (yo también añadí una cucharada de queso Emmental rallado). Normalmente no hace falta añadir sal a la crema ya que la panceta suele ser muy salada. Cuando la masa esté lista, dividirla en tres partes iguales y extender con un rodillo sobre una superficie enharinada hasta obtener una base muy fina que colocaremos sobre una bandeja de horno. Extender una capa de la crema agria, y repartir los aros de cebolla y las tiras de panceta por encima. Introducir en el horno precalentado al máximo (el mío 250 ºC) y dejar unos 10 ó 15 minutos controlando que no se queme. Sacar del horno y servir inmediatamente.

Receta para imprimir

viernes, 3 de octubre de 2008

Día de la Unidad Alemana

Hoy se ha celebrado en Alemania el Día de la Unidad Alemana, fiesta nacional y día festivo, que este año conmemora el 18 aniversario de la reunificación de las dos alemanias, tras el contrato de acuerdo firmado el 3 de octubre de 1990, un año después de la Caída del Muro.

Diecinueve años después de la Caída del Muro pocas huellas palpables quedan ya de lo que fueron las dos alemanias. Uno de los productos más conocidos de la antigua Alemania del Este, la figura del hombrecillo representado en los semáforos del Este o Ampelmänchen, que gracias a un gran marketing se ha convertido en elemento de culto y típico souvenir turístico de la ciudad, tampoco es exclusivo ya del Berlín Oriental. Hoy puede encontrarse al simpático hombrecillo en los semáforos para pasos de peatones de toda la ciudad, especialmente desde que el Ayuntamiento decidió hace un par de años ir reemplazando poco a poco todos los semáforos viejos por nuevos y modernos semáforos, eso sí, al estilo del Este. En un primer momento, y con el objetivo casi maniático de unificar estéticamente las dos zonas, el Gobierno Regional de Berlín había querido eliminar todos los hombrecillos del Este. Sin embargo, gracias al levantamiento popular en pro de los hombrecillos de la RDA, que llegó a ser secundado solidariamente hasta por algunas ciudades del Oeste de Alemania, tuvieron que desistir de la idea.

Como ejemplo del significado que estas figurillas tienen en la cultura popular he encontrado hoy un cartel publicitario con el que el periódico sensacionalista de más tirada en Alemania, el Bild-Zeitung, anuncia su edición especial para el Día de la Unidad.

Hasta hace unos años era posible saber si se estaba en lo que había sido el Berlín del Este o del Oeste buscando uno de estos semáforos para peatones. Como ya he contado, hoy ya no es el caso. Sin embargo, sigue habiendo otro elemento del mobiliario urbano originario de la antigua República Democrática Alemana que todavía encontramos en algunas calles, y que nos garantiza que estamos en la zona de lo que fue la RDA. Quedan pocas... y valiosas... y son así. ¿Quizás sea ahora el momento de idear una buena estrategia de marketing?

miércoles, 1 de octubre de 2008

Dos ingredientes

Dos ingredientes nuevos que quería probar después de ver la receta de esta sopa: las semillas de loto y la salsa de pescado. La receta está sacada de este blog (en alemán) en el que encuentro muchas informaciones y usos para los productos típicos de la cocina vietnamita y asiática. Si os interesa la cocina asiática, os recomiendo también el blog de Álex, Cuadernos de Cocina Oriental (en español), un experto en la cocina de esta región.

La salsa de pescado se obtiene fermentando pescado, a veces hasta un año (y así es el olor que desprende), de hecho estuve considerando seriamente si echaba o no la salsa a la sopa después de abrir el bote y acercarlo a la nariz. La salsa de pescado se utiliza como condimento en la mayoría de platos vietnamitas o como salsa dip. El olor, que más que a pescado me recordó a un queso azul tremendamente fuerte, le da sin embargo un sabor agradable que no tiene nada que ver con el olor.

Respecto a las semillas de loto no estoy segura de haberlas preparado bien, me falta la referencia para saber si estaban poco hechas, al dente o pasadas, el caso es que la textura final era similar a la de unos garbanzos al dente, o dicho sin eufemismos, un pelín duros, triscones más bien. El sabor tampoco fue una revelación, aunque sospecho que el problema esté en la cocinera y no en las semillas. Con las semillas habrá que seguir probando. A pesar de todo, la sopa salió muy rica y con un nombre bien bonito:

Reconfortante sopita de pollo y flor de loto

Ingredientes (2 comensales)

una pechuga de pollo - un puñado de semillas de loto secas - una cucharada de salsa de pescado - 1 cebolla mediana - sal, pimienta y hierbas frescas (albahaca tailandesa y perejil)

Preparación

Poner a cocer las semillas de loto, que habremos dejado en remojo la noche anterior, durante 30 minutos. Durante este tiempo cortar las pechugas de pollo en trozos pequeños y poner a marinar con la salsa de pescado, sal y pimienta negra molida. Cuando las semillas de loto estén tiernas, poner a calentar un poco de aceite en una cazuela y freír a fuego fuerte la cebolla picada en trozos grandes y el pollo hasta que esté dorado. Añadir las semillas de loto con el agua de cocción lo justo hasta cubrir los ingredientes. Cocer a fuego lento durante unos 20 minutos. Probar y sazonar si fuera necesario. Servir con las hierbas frescas.