Últimamente salen pocas cosas de esta cocina, las excusas son el trabajo y el tiempo veraniego que obliga a disfrutarlo en la calle. Así que hoy toca comer fuera. Además, al lado de casa tenemos una joya de la que hace tiempo quería hablar, el restaurante vietnamita Hamy.
El Hamy es un restaurante pequeño y bastante barato. Además de la carta, básicamente de sopas tipo "tanque de combate", lo más popular son los dos platos del día, siempre muy frescos. Generalmente un plato de carne o de pescado con arroz o tallarines (y opción vegetariana) acompañados de mucha verdura cruda crujiente. Los platos saben especialmente a curry, a hierba limón y a albahaca tailandesa, y suelen ser picantes.
El Hamy es un restaurante pequeño y bastante barato. Además de la carta, básicamente de sopas tipo "tanque de combate", lo más popular son los dos platos del día, siempre muy frescos. Generalmente un plato de carne o de pescado con arroz o tallarines (y opción vegetariana) acompañados de mucha verdura cruda crujiente. Los platos saben especialmente a curry, a hierba limón y a albahaca tailandesa, y suelen ser picantes.
Otra de las especialidades del restaurante son las bebidas, varios tipos de lassi y los batidos de frutas, como los batidos de menta y piña o el té frío de lima y hierba limón que alivian el picante de la comida.
Y lo mejor (en este país donde no es tradicional cerrar una buena comida con un café) es pedir un café vietnamita, un tipo de café bombón con leche condensada. Si el tiempo acompaña, solo hay que cruzar la calle para poder echarse una siesta en el estupendo parque Hasenheide, o darse un paseo por las religiones del mundo visitando el templo hinduista Sri Ganesha y la mezquita Sehitlik.
Definitivamente una recomendación para quienes quieran salirse del circuito más turístico.
Definitivamente una recomendación para quienes quieran salirse del circuito más turístico.
HAMY CAFE
Hasenheide 10, Berlín-Kreuzberg
Me encanta salirme del circuito turístico, me encanta la comida oriental, me encanta la hierba limón, me encanta el café bombón y me encanta tu blog.
ResponderEliminarEa, ya lo he dicho todo! Gracias por la recomendación, pero si alguna vez voy por allí te llamo y me haces de Cicerone, vale?
Besitos sin gluten
Que pena que cuando estuvimos, no nos conociamos! Seguro que hubiera sido super diferente!! Vaya sitio más mono, yo no tengo nada de eso cerca de casa!! en fin!!
ResponderEliminarbesitos
Me encanta!!! No conozco ningún restaurante Vietnamita en Madrid pero.... ya sé qué buscar en google próximamente!!! por aquí conozco coreanos y chinos (de los de verdad no de pega), pero no tienen terraza ni vistas a un parque..... y no he visto unos tes con tan buena pinta como ese en mi vida!!!! Besotes!!!
ResponderEliminarPero es que así no dan ganas de quedarse en casa! Dan ganas de irse hasta Berlín... :D
ResponderEliminarYa pasaré, ya pasaré, sea en primavera o en invierno. Y nos vas a tener que mostrar los lugares menos turísticos. Más que una promesa, suena a amenaza así, jeje.
Un abrazo,
Marcela
Noema, me encanta comer en una terracita cuando el tiempo lo permite. Por aquí todavía hace un poquito de frío (si aunque parezca mentira) pero en cuanto me apunto al plan. Que bonito está tu blog con las florecitas!!
ResponderEliminar¡Qué envidia!
ResponderEliminarY es una buena idea si vamos por allí.... A mí me encanta perderme por las calles de una ciudad y pasar un poco de las visitas turísticas. A mi pobre marido le arratro a mercados, supermercados, panaderías, parques recónditos...
Uy, con lo que me gusta a mí la comida vietnamita... Anotado. Yo hace dos años trabajaba por allí "cerca" (bueno, más o menos: Gneisenaustr., hacia Südstern), pero este no lo conozco... aunque había/hay otro vietnamita fantástico por la zona de la Bergmannstr., nunca me acuerdo cómo se llama.
ResponderEliminarMi "Hamy Cafe" es el "Mr Long & friends" en la Kollwitzstr., de la que no se puede decir que sea salirse de rutas turísticas, francamente, pero el sitio es igualmente económico y rica, riquísima la comida...
Un abrazo de este a oeste,
natalia
Zerogluten, veo que andas igual de emocionada con la cocina asiática como yo. Si alguna vez vienes por aquí, y no me llamas... ¡me enfado! :-D
ResponderEliminarIvana, para la próxima visita! Por cierto, que como este quizás no, pero seguro que por el barrio tienes otros sitios más monos :-D
salvia, seguro que en Madrid hay, busca, busca! Las infusiones que hacen, frías o calientes, son mortales :-D (en el buen sentido de la palabra, jeje)
Marcela, pasa, pasa... primavera o invierno ¿argentinos o alemanes? Como le he dicho a Zerogluten, si no cumples tu amenaza, ¡me enfado!
Marilu, aunque parezca mentira por aquí hace mucho calor (bueno, hasta ayer), mi madre lloraba de pena cuando se lo contaba porque allí no hacía muy p'allá. Muy primaverales las florecitas, ya ves :-D
María, lo de los supermercados me suena, jeje. SI es que tenemos unas parejas muy sufridas :-D
natalika, pues apúntatelo para cuando vengas a territorio comanche. ¿Conoces el vietnamita Monsieur Vuong de Mitte? Bueno, pues es el mismo concepto e igual de rico pero unos 2 euros más barato por plato (y menos gafas de sol tridimensionales entre los comensales). He oído hablar sobre el Mr Long & friends, queda también apuntado. En la Bergmann yo conozco un Thai muy bueno, "Pagode", ¿será ese al que te refieres? Ese cae en el próximo reportaje. Besos de vuelta de sur a norte :-D
¡Gracias a todas por pasaros por aquí!
Aysssssss leer estas cosas desde un pueblo de Soria no puede ser nada bueno para mi lado cosmopolita jaja pero de algún modo es un impulso para buscarlo algún día quien sabe;-) BEsos
ResponderEliminarMe pasa algo curioso, cuando llega esta época me viene como una añoranza galopante de esas terracitas urbanas de Berlín... ains... menos mal que me puedo asomar un poquitín a tu ventana. ¡Besos!
ResponderEliminarAh, las sopas Phở, que me ayudan a sobrevivir a estos inviernos... estos días tengo un antojo terrible de comida tai, una buena sopita Tom Yum tampoco está nada mal... y un curry verde de gambas...mmmh... corro a llamar a monsieur M., esta noche cenamos fuera :-D
ResponderEliminarMe encanta Berlín. Estuvimos hace un par de años y volvimos enamorados. Entonces no conocíamos el Hamy pero a la próxima lo tendremos en cuenta. Qué buena pinta tienen esos fideos!
ResponderEliminarPara la próxima, seguro que vamos, y si es contingo e Ivana mejor que mejor!
ResponderEliminarJiji, territorio comanche, eso... El Vuong lo conozco de oidas sólo, pero me imagino la cuota de gafas porno, sí :D
ResponderEliminarUy, en la Pagode solía comer a veces, en mis tiempos por la Gneisenaustr., pero si mi memoria no me engaña mucho, creo que el vietnamita que decía yo era éste: www.viahe-vietfood.de (creo)...
Raquel, jaja, qué gracia me ha hecho tu comentario, chica, no te creas, que mis salidas cosmopolitas (como las llamas) no son tantas. La mayor parte del tiempo la paso en mi "pueblo" que es mi barrio :-D
ResponderEliminarMarona, ¡anda que no tendréis terracitas lindas en Salzburgo!
Arantza, jajaja, eso es lo que me pasa a mí cuando leo cosas en otros blogs... ahora mismo ando a la caza y captura de un coreano ¿por qué será?
Marta, pues hala, la próxima lo pones en la lista!
Vermellos, me da que tenemos que organizar una ruta culinaria por muchas ciudades del mundo ¿nos tomamos todos un año sabático y nos vamos a recorrer mundo? (total, pa'l poco trabajo que hay!)
natalika, ahhhh, sí, conozco el que dices, está en la cuesta enfrente de la Passionskirche ¿no?, no me acordaba del nombre pero he estado dos veces, ñam, ñam, muy rico, sí.
Gracias a todos por vuestra visita. Un abrazo