Hace tiempo di con este librillo cuyo título me atrajo inmediatamente, The Language of Baklava, y que como prometía me ha dejado un dulce sabor de boca. Se trata de las memorias de Diana Abu-Jaber quien, al tiempo que va relatando muchos recuerdos de su vida, intenta trazar un retrato de su padre, un jordano obsesionado por la comida, culturalmente desplazado y que, al igual que otros muchos emigrantes antes que él, cocinaba para recordar el lugar del que procedía y para transmitir esa conexión a sus hijas. Es la historia interminable del emigrante que, en palabras de la autora, "es una especie de fantasía porque se tiene la oportunidad de poder volver a hacerse uno mismo como persona pero, al mismo tiempo, es también una pesadilla porque se pierde tanto".
En el libro se alternan las historias de las épicas comidas familiares con los pintorescos hermanos de su padre, los festines en tiendas beduinas en medio del desierto jordano y la búsqueda interior de la autora por encontrar un lugar en la sociedad norteamericana en la que vive. Todas las comidas son evocadas con humor y acompañadas además de muchas recetas.
Como aperitivo, uno de mis pasajes preferidos en el libro, parte de una conversación con su tía jordana, quien le enseñó que es posible ver la vida desde una perspectiva diferente:
“Marry, don’t marry”, Auntie Aya says as we unfold layers of dough to make an apple strudel. “Just don’t have your babies unless it’s absolutely necessary.”
“How do I know if it’s necessary?”
She stops and stares ahead, her hands gloved in the flour. “Ask yourself, Do I want a baby or do I want to make a cake? The answer will come to you like bells ringing.” She flickers her fingers in the air by her ear. “For me, almost always, the answer was cake.”
Una de las recetas del libro es el ful, plato a base de habas, otro de esos desayunos contundentes de Oriente Medio y uno de los platos básicos en la dieta de Egipto.
Ingredientes
1 bote de alubias (tipo pinta) de lata
2 dientes de ajo
aceite de oliva
sal y pimienta
zumo de un limón
1 cebolla pequeña picada
1 cucharada de perejil picado
1 tomate mediano picado
Elaboración
Lavamos y secamos las alubias. Ponemos un poco de aceite en una sartén y rehogamos las alubias y el ajo durante 10 minutos. Salpimentamos. Retiramos del fuego, añadimos el zumo de limón, un chorro de aceite y aplastamos ligeramente con un tenedor.
Emplatamos y servimos con la cebolla, el tomate y un poco de perejil.
La forma más rica de comer el ful es directamente con pan de pita árabe.
Ver Receta para imprimir
Lavamos y secamos las alubias. Ponemos un poco de aceite en una sartén y rehogamos las alubias y el ajo durante 10 minutos. Salpimentamos. Retiramos del fuego, añadimos el zumo de limón, un chorro de aceite y aplastamos ligeramente con un tenedor.
Emplatamos y servimos con la cebolla, el tomate y un poco de perejil.
La forma más rica de comer el ful es directamente con pan de pita árabe.
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Receta estupenda para el calor, con lo que a mí me gustan estas cosas "de untar" en frío, como el hoummus, o el baba ganhouj (probablemente no se escribe así, es la transcripción francesa con la que lo venden en Quebec). Ese libro también apetece, el pasaje que has escogido es muy bonito, y lo de que los inmigrantes se reinventan al mismo tiempo que destruyen una parte de sí... qué razón tienes.
ResponderEliminarEste plato es el dip nacional de Malta, con otro nombre, Bigilla, http://iban.com.es/tequedasacenar/?p=712. Es más, Ful es como se dice haba en maltés (el único idioma semítico que se escribe con alfabeto latino, de fliparlo); las habas están presentes en toda la gastronomía Maltesa (a uno y otro lado del Mediterráneo), have a look: http://iban.com.es/tequedasacenar/?p=707
ResponderEliminarPa fliparse con estas coincidencias pan-mediterráneas!!!
Muy buenas, ¡madrugadores!
ResponderEliminarArantza, todos esos "untes" me vuelven también loca. Con un pan de pita y a bocados, ir sumergiendo el pan en el ful, rebañar bien, llevárselo a la boca... hmmmm. Sí que es muy rica para el verano, puedes ir probando y ver cómo te gusta más, con las habas enteras, a medio chafar o chafadas (que no chaladas) enteras.
La cita es de la autora, no mía :-(
Don Ibán, de gastronomía maltesa poco sé (aparte de lo que nos has ido enseñando en el blog), pero estudié árabe durante un tiempo y descubrir el maltés fue una maravilla, con su alfabeto latino :-D
Por eso no es de extralar que "ful" (a veces transcrito como "foul") sea también "haba" en árabe.
Lo que se aprende aqui, justo hace unos días me habian hablado del maltés pero no me habían contado su origen: very interesting!
ResponderEliminarLo mismo que tus recomendaciones lectoras y gastronómicas, voy a intentar pedirle a un amigo q se va a USA que me traiga algún libro de la autora. thanks
Y ahorita voy a decir algo que a lo mejor me cuesta la vida social y cocineril... (¡glups!) ¿qué tal quedaría el platillo con unas judías de tolosa? Es que a estas alturas del año ya no apetecen de la manera tradicional. ¿he dicho alguna barbaridad? ¿me seguís "ajuntando"? ;)
ResponderEliminarMe encanta este dip Noema, como substituto de lo socorridos guacamoles, humus y mutabales.Creo que tengounas pintas que se están abrriendo hace tiemo en el fondo del armario, hora de comérselas.
ResponderEliminarUn beso
y si, el ful es el tipico desayuno egypto. es muy rico y es muy importante, porq en egypto las dos comidas principales son el desayuno (con ful o tameya -q son como falafel) y despues otra comida alrededor de las cinco. ademas hay una merienda a la una. asi q si no tomas un rico desayuno te moris de hambre hasta las cinco!!! eso es para no comer nada pesado en las horas mas calientes del dia.
ResponderEliminarme encanta tu blog!
Me encanta Noema! me lo paso en grande con todo en lo que se pueda ir mojando. Ya te veo con el pan de pita en una mano y en la otra el libro, del que me ha encantado lo que has escrito en el post.
ResponderEliminarBesos
Que bonita historia Noema! Hay que ver que cosas más bonitas te encuentras por ahí. Que gracia lo del niño o el pastel, supongo que por esa regla de tres el indice de natalidad blogero-cocinero estará por los suelos!
ResponderEliminarBesetes!
Hola Noema, guapa,
ResponderEliminarme encanta tu blog!
Muchisimas gracias,
un besazo,
alex
A mí este tipo de purés de legumbres con panes planos me encanta. Lo mismo sin son árabes, que griegos, que indios, que de garbanzos, habas o berenjenas, pero si encima están chaladas de amor, para qué queremos más?
ResponderEliminarGracias por la recomendación del libro.
Besitos sin gluten
Pensaba que te habia dejado un comentario??!! En fin, que me ha encantado las habas y el libro, que sepas que tengo todas las pelis gastronómica que recomendastes en su día pendiente de ver!
ResponderEliminarbesitos y quiero más, más!
Yo para desayunar no puedo.
ResponderEliminarNecesito café y tostadas.
Pero como ensalada de verano me parece excelente.
Besos.
Esperanza.
the answer is always cake..... :)
ResponderEliminarMe encanta la receta, la voy a probar con unas judías pintas de Lanzarote que tengo por ahí.
Por cierto, ¿sabes que el tema del HEMC de este mes es cocina de oriente medio?
un beso.
Nieves, buena idea, si consigues alguno de sus otros títulos ya me dirás qué tal está, yo tengo ganas de leer alguna de sus novelas, Crescent o Arabian Jazz.
ResponderEliminarMarona, como a alguien se le ocurra decir algo por ese comentario... vamos... pongo el cartel de Reservado el derecho de admisión en el blog. Faltaría más, con judías de Tolosa y de donde quieras, ¡aquí nada de exclusivismos ni purismos esnobistas (qué de -ismos)!
CRIS, a la olla con las pintas!
erica, gracias por tu comentario y bienvenida a esta cocina.
Marta, pues imagínate comerse este plato entero sólo mojando :-D
Te tengo que desilusionar, soy incapaz de comer y leer al mismo tiempo, una cosa detrás de otra :-D
marilu, esta receta la aprendí en la residencia de estudiantes, había muchos estudiantes árabes y era siempre muy socorrida (y barata).
Guru Masala, gracias por el piropo (menos mal que no se ve cómo me he puesto colorá). Es siempre un placer tenerte por aquí :-D
Zerogluten, loquitas perdidas de amor :-)
Ivana, PUES NO, no me habías dejado un comentario, bgrhgbrhgbrhg.... es broma, mujer, estamos apañaos si esto empieza a convertirse en obligación.
anta, yo también, lo primero el café, pero los fines de semana, levantarse tarde y hacer un brunch o desayuno-almuerzo con cositas ricas, es cuestión de costumbres, y te aseguro que a las cosas buenas se acostumbra una enseguida.
Ajonjoli, always cake as well! ;-D
Tenía pensada otra recetilla para el HEMC, a ver si me da tiempo, gracias por recordármelo.
Gracias como siempre a todos por pasaros por aquí. Un abrazo.
Noema, no conocía ni el libro ni la receta. Las habas me encantan y los dips para untar también.
ResponderEliminarPendiente...
Un beso y gracias
sol, pues eso, ya son dos cosas pendientes. Un abrazo.
ResponderEliminar¡Hola!¿Tienes facebook?,en mi blog "El rincón de Angy" tengo un sorteo de un broche de una brujita y algunas cosillas más.¡Pásate!
ResponderEliminarmuak
Hola, hace una semana cree mi blog y eo que a ti te gusta lo inetrnacional como a mi. Este entrante tiene muy buena pinta!
ResponderEliminarEl ajo iria en crudo al final o reogado con las alubias?
ResponderEliminarJuli, el ajo iría rehogado con las alubias en la sartén, sí. Aunque
ResponderEliminarsi te gusta con más sabor a ajo, un poco al final seguro que también le va muy bien.
Gracias por el comentario, ¿ves? Mal escrita que estaba la receta, ahora mismo la corrijo.