Éste es el final de un paseo preprimaveral de domingo, un buen final.
Comida rápida disfrutada con calma, hamburguesa con queso, patatas fritas y una buena cerveza de malta. Y ¿por qué es especial? Todos los ingredientes 100% ecológicos, todos 100% vegetarianos.
Yellow Sunshine es un restaurante de comida rápida que sirve exclusivamente platos vegetarianos o veganos. En la carta todo tipo de hamburguesas, gyros e incluso salchichas currywurst.
Casualidad o no, el nombre del restaurante sugería un buen final para el paseo dominical. Con los primeros rayos de sol y días de luz es obligación salir a pasear. Este fin de semana hemos tenido un avance de la primavera. Increíble si pensamos que el miércoles cayó la nevada más fuerte de lo que va de invierno.
Yellow Sunshine es un restaurante de comida rápida que sirve exclusivamente platos vegetarianos o veganos. En la carta todo tipo de hamburguesas, gyros e incluso salchichas currywurst.
Casualidad o no, el nombre del restaurante sugería un buen final para el paseo dominical. Con los primeros rayos de sol y días de luz es obligación salir a pasear. Este fin de semana hemos tenido un avance de la primavera. Increíble si pensamos que el miércoles cayó la nevada más fuerte de lo que va de invierno.
Antes de vivir en Alemania me hacía gracia ver a europeos del norte sentados en calles, plazas y parques de España absorbiendo energía solar al igual que reptiles. Un día, y después de varios inviernos aquí, me sorprendí a mí misma paralizada ante los primeros rayos con la misma aptitud de reptil. ¡Ahá! ¡Eso es lo que se siente cuando se vuelve a notar que el sol realmente calienta después de meses de haber estado ahí como si fuera la luz de una nevera!
El paseo nos llevó hasta el centro para ver uno de los muchos cambios, polémicos o no, que están ocurriendo en esta ciudad:
(Antonio, esta foto va por ti)
Restos actuales del Palacio de la República
A mí me pasó exactamente igual. Siempre me reía del ansia solar que tienen los centroeuropeos y ahora salgo pitando de casa cada vez que llega un rayito a la tierra... aish, ¡cómo nos hemos de ver! :D:D:D
ResponderEliminarBesos!
Pues sí, Noema, en algún viaje por Alemania y Holanda, me he encontrado, casi sin quererlo, sentada al sol en esos parques tan limpios y bonitos que hay, comiendo pan negro y queso, para seguir después con otra tradición española: la siesta ;))
ResponderEliminarSaludos.
canela
Gracias por la mención Noe. Sí, no hace mucho en un noticiario hablaban precisamente de la polémica que había suscitado la demolición de este edificio-emblema de nuestra querida Berlín. La ciudad se irá reconvirtiendo con el paso del tiempo hacia otra dimensión y otras estructuras. Intuyo que el aroma del berlín del este, y todo lo que ello conlleva, lo irán poco a poco arrinconando a través de nuevos espacios y estructuras arquitectónicas. Confío no obstante en el pueblo alemán, y seguro que gana la evolución frente a la involución y la barbarie que hoy en día significa la cultura del ladrillo en España.
ResponderEliminarUn beso preciosa.